Dedication: Dedicación: A mi mama y papa- mis más destacados maestros
Vivimos nuestras vidas de momento a momento, de respiración a respiración.
A veces, aguantamos nuestra respiración para que el momento dure, pero otras veces, cerramos los ojos y rogamos para que el momento pase.
Es como estar bajo el agua donde el tiempo se para y el sonido desvanece, pero cuando emergimos a la superficie volvemos de inmediato a la intensidad de la vida. Están los escapes temporales, como cuando entumecimos los sentidos, pero al otro lado de eso también está el mundo que requiere de tu presencia. Cada minuto se convierte en un nuevo comienzo.
Por alguna razón tenemos vidas similares. Nacemos, crecemos, y al final morimos. Lo que nos separa no son nuestras riquezas, nuestras familias, nuestras carreras, o nuestros amigos. Sino como decidimos vivir nuestras vidas, lo que hacemos con lo que se nos ha dado, lo que hacemos cuando la vida nos hiere, eso es lo que nos define. En cada minuto se nos presenta la oportunidad de elegir nuestros pensamientos, nuestras reacciones, y nuestras acciones. El hecho de que estamos aquí realmente es un milagro, entonces, aguantamos nuestra respiración o decidimos respirar profundamente, incluso cuando la vida nos está desafiando?
En los momentos de la fea e incómoda verdad casi nunca nos vemos glamourosos o en control. Es normalmente un sentimiento de estar dando vueltas hasta el punto de querer vomitar, rogar por misericordia, y buscar la fuerza para seguir aguantando. Con lagrimas corriendo por nuestros cachetes pintando nuestras caras como una zona de guerra. En nuestras manos y rodillas, intentamos gatear hacia la luz donde tenemos la esperanza de volver a encontrar el camino hacia la comodidad y la certeza.
Mantener la fe y la certeza de que este momento también pasara es lo que me ha hecho sobrevivir las tormentas de mi vida. He tenido momentos en los que he entumecido los sentidos y me he negado a tomar las acciones que me permitirían vivir una vida en mi propia grandiosidad. Esta es la historia de unos momentos que han ayudado a definirme.
—
Crecí en una familia que desde afuera probablemente parecía perfecta, pero detrás de las paredes otra película se desarrollaba. Mis padres se aman, y me aman a mí, mucho. Eso es algo que siempre me dejaban saber- aunque a veces sus acciones me hacían dudar. Ambos son personas hermosas, pero tienen sus propios problemas. Lidiaban con sus problemas por medio de grandes cantidades de alcohol, cigarrillos, y otros métodos de entretenimiento, dejando casi nada de tiempo para la atención de una niña. Mis papas se divorciaron cuando yo tenía 5 años y me quedé viviendo con mi mama, lo cual le dio forma a mi vida y a mis creencias de una manera que jamás pude haber imaginado.
Siempre supe que mi familia no era como las demás familias y cuando tenia 7 u 8 años me di cuenta por qué. Mi mama se quedaba dormida en el sofá cada noche, sin yo poder despertarla, y ella hablaba de manera muy extraña a veces, o pasaban semanas sin que ella se levantara de la cama. Mi mama era una alcohólica y rápidamente aprendí que quedarme fuera de su camino era la mejor decisión.
El problema con estas decisiones que tomamos como niños y niñas es que creemos que nos servirán el resto de la vida. Ahora se que ese no es el caso. Una creencia que adopte y me resulto exitosa cuando yo tenia 6 años, no me ha servido mucho los últimos 20 años o más.
Eventualmente cuando tenia aproximadamente 12 años me di cuenta de que jamás podría ser libre para vivir mi propia vida a menos de que me fuera de la casa de mi mama. Amaba a mi mama inmensamente, pero cuidarla a ella se convirtió en mi actividad después de la escuela mientras que estar en el colegio se sentía como mi tiempo libre. Así que mi papa y yo llegamos al entendimiento de que seria mejor que yo fuera a vivir con el y su nueva familia quien yo amaba mucho. Era como pertenecer a una familia “normal”, una experiencia que nunca había tenido antes. Vivimos juntos durante 3 años, los cuales fueron uno de los mejores años de mi vida. Durante ese tiempo, mi mama había ido a un centro de rehabilitación y estaba sobria y la vida por fin comenzaba a sentirse bien.
Luego las cosas se empezaron a deshacer. Primero, mi papa y su esposa se divorciaron así que solo quedamos mi papa y yo. El estaba muy deprimido y me convertí en la persona con quien el se desahogaba. Ese mismo año, yo aun tenia 15 años, recibimos mas malas noticias. Era un domingo en la noche y habíamos estado afuera todo el día cuando sonó el timbre de la casa. Abrí la puerta y vi que había dos policías parados afuera. Mi papa me dijo que fuera a mi habitación, y como me había vuelto muy buena en ser fácil e invisible, seguí sus órdenes. Pasaron casi 10 minutos cuando el entro a mi habitación con lagrimas en los ojos. Yo estaba preocupada. El lloraba y me abrazaba. Yo no entendía lo que estaba pasando. El me miro y entre lagrimas me dijo “querida, tu mama esta muerta.” ¿Que? ¿Como? ¿Cuándo? ¿Por qué? NO! No lo podía creer. No podía ser cierto. Yo estaba totalmente impactada. Tus papas no están supuestos a morir- nunca. Todo se volvió muy borroso después de eso, pero al mismo tiempo había una fuerza de voluntad en mi interior que comenzó a burbujear. Yo entendía que esta sería una nueva era de mi vida y que nada seria igual. Ahora me conocían como la chica con la madre muerta. De un día para otro las personas no sabían como hablarme y otros mantenían su distancia.
Toda mi vida, me esforzaba para ser normal o como todos los demás, haciendo lo que fuera para quedarme bajo el radar y fuera de problemas. No importaba lo que yo hiciera, la vida parecía tener planes diferentes para mí. Quería que yo fuera diferente, y definitivamente me sentía así.
Entonces, porque les estoy contando esta historia? Porque este fue uno de los momentos que más me ha definido. Un momento que he revivido una y otra vez. Me enseño que la vida es frágil y que hay que estar agradecido con lo que se tiene. También me dio la fuerza para entender mi propio poder y para ver la oportunidad que hay en cada momento. Me di cuenta de que ya no tenia las cadenas del alcoholismo de mi mama envueltas alrededor de mis muñecas, así que de cierta manera yo estaba libre. Jamás compartí con alguien la experiencia que tuve viviendo esos 10 años con mi mama, pero ahora que ella no estaba, yo ya no sentía la necesidad de protegerla. Así que comencé a compartir mi historia. Por fin poder compartir esas experiencias que había cargado todo ese tiempo, y por fin soltar toda esa vergüenza fue como tomar un respiro de aire freso. Ya no tenia que cargar esos secretos. Me prometí a mi misma jamás volver a guardar un secreto así.
Al poco tiempo después de que mi mama falleciera, decidí compartir la verdad con mi clase sobre lo que en realidad había pasado, ya que les había mentido sobre tantas cosas porque no les podía decir la verdad. Menos de 4 semanas después de que mi mama murió me pare enfrente de mi clase y profesores y compartí mi historia. Recuerda que siempre me gustaba mantenerme bajo el radar así que nadie se esperaba esto de mí. Hable durante dos horas compartiendo con mis compañeros de clase lo que realmente es vivir con el alcoholismo, y como es vivir en un hogar donde este le gana a el amor. Yo había pertenecido a esta clase durante casi 10 años, y mis compañeros estaban impactados y triste, pero mas que todo profundamente conmovidos por mi honestidad y crudeza. La conexión que establecimos ese día, y la memoria de salir tan unidos ese día de clase, lo que supongo que fue la manera de mis compañeros expresar lo que sentían, es algo que siempre se ha quedado conmigo. Es lo que me ha motivado para seguir compartiendo mi historia y siempre que la comparto siento una conexión profunda. Quizás fue mi destino ser diferente o tener una vida con tantos desafíos para poder compartir mi historia y apoderar a los demás para compartir la de ellos. Una cosa que tengo clara es que la vida te seguirá empujando para que entres en tu verdadero poder, lo hará hasta que dejes de resistirlo. Me tome mucho tiempo para poder entender que puedes escapar tu pasado y tu destino o puedes aceptarlo y convertirlo en tu motivación.
Espero que esta historia te pueda inspirar a mirar los momentos que te han definido y a abrirte a la posibilidad de como puedes impactar a el mundo con todos los talentos maravillosos que posees.
Esta historia fue publicada originalmente en ingles y ha sido traducida al español. Puedes leer la versión original aquí… Our defining moments